La Rubiah: bullying, anorexia, laxantes, pastillas, diuréticos…

Todo empezó cuando tenía 3 añitos y me mandaron al colegio por primera vez. Era una niña delgada, pero a pesar de ello era la MARGINADA de toda la clase, no tenia amigos, todos se metían conmigo… Pasaron los años y me fui haciendo mayor, según iba creciendo los insultos también crecían, y la soledad me abarcaba. A los 9 añitos fui por primera vez a un psiquiatra no podía dormir a causa de lo que me pasaba en el colegio (en casa no sabían nada), como esta no me dio resultado, me fui a una psicóloga infantil…tampoco me ayudo mucho pero por lo menos hacia todo lo posible porque durmiese por las noches, aunque no lo consiguiera. Me pasaba las noches con mi padre andando en la bici estática o jugando a las cartas para ver si así conseguía cansarme y dormir. Fingía estar enferma par no ir al colegio pues allí me insultaban, me escupían, me pegaban,… todo lo imaginable. Así estuve aguantado hasta los 15 años que me cambiaron de colegio.

A esos años fui al instituto, las comidas las hacia sola pues mis padres trabajaban… llevaba ya como tres años sin comer casi, pero cuando me paso esto deje de comer radicalmente y me tomaba drogas para poder bajar mas rápidamente. A parte de pastillas para adelgazar, laxantes (30 pastillas al día) diuréticos, vomitando,… creo que he probado y sigo tomando de todo. Bajé de 72 kilos que pesa a 40 en muy poco tiempo. Mi madre y mi tía, me decían que al final iba a terminar enferma, mi respuesta siempre era la misma “yo controlo”, hasta que llego un momento que dejé de controlar y todo se me fue de las manos. Todavía seguía yendo a la psicóloga y como me conocía de hace mucho tiempo me mando a un psiquiatra especializado en trastornos de conducta alimentaría. Nunca me había metido en una página pro-ana, no había leído ningún tipo de tips para bajar de peso. Todo lo hice por mi propia voluntad. Este medico me dijo que estaba enferma y que como siguiese así me iba a ingresar. Nunca pensé que iba a llegar a estar en un hospital, pero ahora esa es mi vida, el hospital. Me ingreso, me acuerdo que fue un 2 de mayo y estuve allí todo el mes, como era menos de edad no podía ingresarme en psiquiatría y estuve en endocrino. Paso el tiempo y los ingresos fueron aumentando. Hasta que este médico me dijo que no podía hacer más por mi y me derivo a otra psiquiatra de un hospital, a la cual sigo yendo. Lo primero que hizo fue quitarme mucha de la medicación que tomaba, ahora tomo 14 pastillas al día mas un jarabe, y después me mando al hospital de día del allí…como seguía bajando de peso a pesar de estar comiendo (es verdad que solamente hacia esa comida) me termino ingresando, y aquí si que fue uno tras otro, estaba un mes en el hospital, y una semana en casa…así hasta hace dos años, cuando volví a bajar a los 40 kilos (mido 1,70m). Me mando a un centro especializado que hay en Barcelona y que es muy conocido ITA, pero si cuento la verdad solo tiene nombre porque lo que es ayudar no ayudan y te engordan sin importarles que tal estas mentalmente. Así que más bien dure muy poco tiempo, estuve un mes y me fue pero en ese mes lograron engordarme más de 10 kilos. Volví a casa, volví con mi psiquiatra y estuvimos haciendo lo imposible porque yo me viese bien y volviera a mi peso, más o menos aceptable. Lo conseguimos pero al final me pase y volví a bajar mas de la cuenta. Me mando a otro centro este está en Cuidad Real, aquí estuve el año pasado, tres veces ingresada….la primera vez tres meses, y luego de mes en mes… aunque este lejos de mi casa es en el mejor sitio donde he estado y mejor me ha tratado, te ayudan, les importas mentalmente y sobre todo estas entretenida todo el día para no poder pensar en nada.

Ahora mismo, estoy pasando por otro mal momento, muy mal momento… hacia tiempo que no me encontraba así. Estoy esperando otro ingreso, pero después de pasar por tantos se que eso no es lo que mejor me viene, pues estoy allí uno, dos, tres meses…pero cuando vuelvo a casa todo vuelvo a la “normalidad”, todo vuelve a lo mismo, necesito cambiar de sitio, de casa. Por este problema me he cambiado cuatro veces de casa al principio todo muy bien, pero cuando pasa el primer mes ya esta, lo vuelvo a coger como costumbre y empiezo con lo mismo de siempre, laxantes, diuréticos, vómitos, ejercicio hasta no poder más… Estoy adelgazando a pasos agigantados, mi madre lo nota, sabe que no como, Ya es todo tan normal que no me dicen nada, ellos también lo tienen como costumbre. Me gustaría tener su apoyo y más en estos momentos tan malos, pero no. He intentando muchas veces suicidarme, con pastillas, con cortes profundos hasta desangrarme, pero tengo tan mala suerte que ni eso me dejan. No me dejan vivir feliz, Para mi la muerte es el estado feliz, tanto para mi como para mi familia, todos descansaríamos. Ayer tuve que irme a urgencias, mal de potasio, de sodio, casi a punto de entrar en coma y todo por beber más de cinco litros de agua al día. Ahora con sueros hasta que se me pase. Por eso digo que mi segunda casa es el hospital, aunque a veces diría que es la primera, paso allí más tiempo que en casa, todos los médicos me conocen, a todos les conozco.

Y esta es mi vida, me han dicho que ya soy crónica, después de más de 14 años de enfermedad, ¿qué pretenden que haga ahora? Quiero seguir así porque no puedo hacer otra cosa, y como dice mi médico el que hace lo que puede no esta obligado a más. Y en este momento estoy así.

De nuevo por aqui

Hacia muchisimo que no me pasaba, un mes casi o ni tan casi. Y aquí sigo aguantando como una campeona, si que es verdad que cada día me cuesta más hacer las cosas pero prefiero sentir eso a estar gorda. Todo el mundo me dice que me he adelgazado que la cara la tengo más chupada, que me estoy quedando fea de lo delgada que estoy. Me gusta tener la cara fina a la hogaza de pan de algunas otras personas, que por ahí si que no paso.

Por lo demás no hay mucho mas que contar que cada fin de semana me aburro mas ya ni salgo, con lo que me gusta prepararme, estar wapa, que una esta luchando por ser delgada para poder después lucirlo y no quedarme en casa.

 Ah!! otra cosa que me hace gracia es oír en los probadores de las tiendas, pues he cogido una 34 y abulta el doble que yo...pero a ver, que te pones una faja o algo así porque tu ahí no entras ni con calzador, como mucho en una 40 y de milagro. La gente se compra ropa pequeña para motivarse pero escuchar esos comentarios, a mi por lo menos, me hacen daño. Pues cada día lucho por ser perfectas y a ellas eso parece darles igual.

Nuevos proyectos

Hace mucho que no escribo, pero no significa que no haya andado por aquí...es que como diría yo, no he tenido ni tengo ganas de nada. Y cada día que pasa esto va a más, como me dice el medico poco más vas aguantar esta situación, pero me da igual...voy hacer todo lo posible por aguantar, aunque ni me pueda levantar de la cama pero he jurado y perjurado que cuando me vaya de vacaciones a finales de junio (que encima es a la playa) iba a estar delgada y ello estoy.

 

No sé lo que peso, tampoco lo quiero saber...creo que no me hace bien, más que nada porque me obsesionaría cada día un poco mas por si fuera poco. Lo que hago es comprobarlo con los pantalones que normalmente me pongo y ellos me dicen que si que he bajado y bastante, más que nada porque se me cae ya ni con cinturón los puedo sujetar. Me he pasado a los de goma (que alguno también se me caen y a los vestido)... he pasado de tener que comprar una talla M a comprar una XS y de ahí no me pienso bajar, vamos que no me van a engordar.

 

Tengo dos semanas para decicirme que hacer con mi vida, una de mis mejores amigas al igual que el médico piensa que el ingreso es la mejor formar de solucionar el problema. Si vale, el problema se solucionaría mientras yo este allí dentro pero una vez fuera todo volvería a empezar y para que pase eso, realmente paso de ingresar. También tengo otra opción que es ir a comer con una amiga todos los días...me apetece, pero en este momento no me entra nada de comida. Lo máximo que como al día es un vaso de leche de soja y de vez en cuando una manzana ya cuando me obligan mis padres... pero cuando ocurre eso me siento la persona mas gorda de todo el planeta, aunque sea una manzana, una pera o una naranja...me alimento a base de agua. Las únicas personas que lo saben, mi médico, alguna amiga y mi tía...esta última no sabe como aguanto, menos mal que no le dice nada a mis padres de que no voy al comedor de hospital ni que como por miedo a engordar...

 

Igual no aguanto 20 años más así, pero mientras aguante así voy ha seguir, nada ni nadie me va a parar y menos en cosas así. Mi novio los fines de semana me hace comer, pocas veces lo hago y cuando no me queda otra me inflo a laxantes, diureticos y a vomitar... parece que no sé hacer otra cosa. Mi vida gira entorno a todo esto. Cuando gente por la calle me pregunta a ver si me encuentro bien  (me lo deben notar en la cara) les digo que si pero no me creen :( y ya no se que excusas poner. No se que decirles para no contarles en realidad lo que me pasa, porque les he dicho ya tantas cosas, me pasa lo mismo en casa a la hora de comer...les he dicho tantas cosas que las excusas se van acabando. Son ya 14 años y no doy más de si, mi cabeza ya no me da :(.

Alcohorexia

¿ Quiénes son las alcoholoréxicas ?
Son, mayoritariamente, mujeres que tienen un problema de anorexia, es decir que no quieren alimentarse y que pueden llegar a inducirse el vómito por temor a engordar, y que al mismo tiempo beben alcohol para alcanzar un estado de inconsciencia y no tener hambre. Pues el alcohol puede cortar el apetito

¿ Cuáles con sus efectos ?
Desde el punto de vista nutricional, es una catástrofe. Los daños son múltiples: pérdida del cabello, reducción del volumen de las mamas, interrupción de la reglar, osteoporosis y carencia de numerosas vitaminas que generan problemas cutáneos, neurológicos e inmunológicos.

¿ Cómo se llega a la alcohorexia ?
Detrás de esta forma de autodestrucción, existen grandes sufrimientos psíquicos: un padre ausente o incestuoso, una madre asfixiante... Estas mujeres se niegan a depender de la comida, que le recuerda al progenitor malo. Prefieren llenarse con un producto que las lleva a alcanzar un estado placentero de manera inmediata, regresiva. El alcohol es un biberón, un "medicamento", que llena el vacío interior. Pero que, también conduce a una soledad extrema.

¿ Y ahora ?

Después de tiempo sin escribir, solo puedo decir que estoy cabreada conmigo misma... más que anda porque antes conseguía lo que quería pero ahora, en estos momentos mi cabeza esta tan machacada que lo que antes me costaba un día ahora lo hago en un mes... aunque por fuera este haciendo exactamente lo mismo, mi cuerpo no responde igual. Todo una mierda!!! Igual que la vida que llevo en estos momentos...

No se lo que quiere decir ser feliz, esos momentos de felicidad... no pido estar las 24 horas del día día, pero si aunque sean 5 minutos. Por esos minutos daría mi vida. Estoy cansada de tener que entretenerme después de cada comida para no darle vueltas a la cabeza, cansada de no poder parar ni un segundo siempre tengo que estar haciendo algo, cansada de no tener ganas ni de hablar ni de estar con nadie,... y cosas así, miles.

Podría seguir escribiendo, seguir contando cosas pero una también se cansa de tener que estar dando explicaciones a todo el mundo y contar mi vida a gente que ni si quiera les interesa.

....

Pongo estos puntos porque tengo tanto lío que no se ni que titulo poner, ni sobre que escribir, ni nada,...

Ya estamos a mitad de semana, y como siempre hago una media de como ha sido la semana en general...sinceramente pocas veces me sale algo distinto, ¿tan mal estoy? ¿tan obsesionada vivo? parece ser que si y creo que cuantos mas días pasan las cosas van a peor, los comentarios de la gente que pretender ayudar y solo hacen más que hundirte, objetivos que te marcan los cuales ves imposible de cumplir por ti misma, porque sabes (aunque no quieras) que necesitas ayuda y te cuesta tanto pedirla como admitirlo. Aunque hay veces que lo haces y te ves SOLA, sin nadie a tu lado, sin nadie que te de un abrazo, un beso o cualquier gesto de cariño que en esos momentos tanto necesitas, y claro es tan poco probable que te lo den...

El fin de semana ha terminado, ya he vuelto de ese lugar que tanto me gusta, de ese lugar del cual he disfrutado más que nunca pero no como las personas normalmente lo hacen, sino a mi manera que no es para nada la correcta... pero me da igual, voy a seguir haciendo lo mismo siempre que pueda, y espero que sea muy a menudo.

Tanto cambio...

Ni se el tiempo que llevo sin pasarme por aquí, el mismo tiempo que mi cabeza lleva echa un lío más de lo normal.

No se hace cuanto me volví de Ciudad Real, aquella ciudad que tan poco me gusta pero que tan buenas amigas me ha hecho tener. A cada sitio que voy, se que voy a encontrar a alguien con quien pueda contar el resto de mis días (que a este paso no van a ser muchos). Que aunque lleve tiempo sin hablar con ellas, sin escribirme con ellas, sé que el día que las necesite o me necesiten vamos a estar la una para la otra.

Desde que empecé en el 2008 mi racha de ingresos (anteriormente ya había estado más veces) mes si y mes también. Muchas cosas han cambiado, ha habido subidas y también bajadas. Las subidas solo las noto yo porque nunca nadie me dice nada, no se si por miedo o porqué pero al igual que me dicen en las bajadas que se me nota mucho y que así no puedo seguir. De la otra manera también me ayudarian (aunque ya se yo que así no puedo seguir). Digamos que ahora es una de esas épocas en las que nadie me dice nada y eso me esta empezando ya a rallarme entera (más de lo que estoy). Necesito volver a ser la de antes, la que aunque no me sienta a gusto conmigo misma me veo algo mejor de lo que me veo ahora... a la que la ropa se le cae y con todo tiene que llevar cinturones. Porque si hay algo que no hago es comprarme una talla menos, siempre utilizo la misma, desde hace mas de 10 años estoy utilizando la misma da igual que este en 40 que este en 54. Ahora se esta programando el que será mi XX ingreso, pero esta vez va a ser mas duro aunque este al lado de casa, pero precisamente eso lo hace duro más que nada porque aquí, donde vivo, no hay una unidad especializada lo que significa que me tienen que mandar a un sitio el cual hasta decir el nombre me asusta, con solamente decir Zamudio los pelos se me ponen de punta, se me cierra el estomago, las horas por las noches pasan, las ganas de hablar se me van y solo me dan ganas de llorar.

A pesar de todo esto, este fin de semana me marcho... me voy a un sitio que tenia muchas ganas, estaba esperándolo con muchas ganas a que este día llegase. Pero ha día de hoy puedo decir que no tengo ninguna ilusión, que no voy a disfrutar, voy a machacarme, a romperme algo si puedo, a hacer cosas que no debo... y todo porque a la vuelta lo mas seguro es que me espere lo que menos quiero.

El martes, día que no olvidare, ese día malo para algunas personas... a me me gusto. Tu abrazo y su beso me dieron fuerzas para seguir ese día para delante, aunque solo duro unas horas, pero menos es nada.